Mercado Calabajío es uno de mis blogs favoritos y Carlos, después de tantos años de compartir aventuras blogueras ya es para mi como de la familia. Son innumerables las recetas suyas que he hecho, y la mayoría de ellas ya han pasado a formar parte de mi repertorio habitual aunque casi nunca las publico porque sus posts me parecen tan completos y tan bien explicados que poco puedo añadir yo. Pero la verdad es que recetas como este pollo al limón las he hecho ya tantas veces y son tan buenas que las tengo que tener en mi recetario particular.
La verdad es que yo no frecuento los restaurantes chinos, así que no puedo comparar esta receta con la de estos establecimientos, pero os puedo asegurar que este pollo al limón resulta verdaderamente delicioso si os gusta un potente sabor a limón, claro. Por lo demás, nada de ingredientes raros y una elaboración sencillísima, así que lo tiene todo para convertirse en un plato estrella. Acompañadlo de un arroz tres delicias y tendréis el éxito asegurado.
Poner en un cazo todos los ingredientes de la salsa menos la Maizena y las rodajas de limón. Ponerlo al fuego hasta que hierva, disolver la Maizena en un poco de agua o caldo y verterla en el cazo, remover con una cuchara sin apartarlo del fuego hasta que espese. Podéis ajustar el espesor que más os guste añadiendo un poco más de Maizena si está muy líquido, o de agua si esté demasiado espesa. Añadir las rodajas de limón y dejar cocer solamente dos minutos más.
Trocear el pollo en porciones de bocado. batir el huevo y mezclarlo con la maizena y el agua, ha de quedar una pasta un poco espesa. Sazonar con sal y pimienta y sumergir los trozos de pollo, remover para que todo el pollo quede bien cubierto con la pasta. Calentar el aceite en una sartén honda a fuego vivo y freír el pollo procurando no llenar la sartén para que no baje la temperatura del aceite, ir sacando los trozos de pollo cuando estén bien doraditos e irlos poniendo en una fuente. Naparlos con un poco de la salsa caliente y servir el resto en una salsera para que cada uno se sirva la que quiera.